La actual Basílica de la Virgen del Puy se construyó entre los años 1.949-1.951. Su arquitecto fue el pamplonés Víctor Eusa, uno de los mejores arquitectos españoles del siglo XX. Eusa dejó su huella en muchos edificios de Pamplona. Suyos son el Seminario, el Colegio de los Escolapios, el Casino Eslava, etc.
La Virgen del Puy, según la tradición, fue encontrada por unos pastores de Abárzuza en la colina donde se levanta la basílica. Unas estrellas iluminaban el lugar y su brillo atrajo a los humildes pastores que descubrieron a la Virgen del Puy en una cueva.
La abundante luz que entra por las vidrieras, y sobre todo la luz cenital que ilumina el templo por la linterna que está en su centro, quiere recordar esa luz celestial que señaló, según la tradición, el lugar de aparición de la Virgen. En las vidrieras, de la casa Maumejan de Madrid, predomina el color azul. El mismo color con el que se identifica la luz de las estrellas. En las vidrieras podemos ver a los pastores de Abárzuza que descubrieron a la Virgen. También en ellas está escrita buena parte de la letanía de la Virgen. Hay que recordar que en la letanía, entre otras denominaciones, la Virgen es la Estrella de la mañana. Curiosamente Estrella de la mañana no aparece en las vidrieras cuando todo el templo son cientos de estrellas. Sin duda no es casual. No es un olvido. No aparece en la vidriera puesto que la Virgen, como Estrella de la mañana, ya está sobre el altar, en el lugar principal del templo.
El escudo de la ciudad de Estella es también una estrella.
Las estrellas de la aparición, la Estrella de la mañana y la ciudad de Estella (estrella). Todo el simbolismo que une a la Virgen del Puy con la ciudad está representado en el templo magistralmente.
En el exterior de la basílica encontramos algunas curiosidades. La primera es el nombre de la calle donde se encuentra la basílica: Abárzuza. Es otro recuerdo a los pastores de la aparición.
Si rodeamos el templo encontramos un monolito que recuerda la aparición del Niño Jesús que fue robado y que apareció después junto al exterior del ábside de la iglesia.
Frente a la entrada de la basílica hay una amplia explanada ajardinada. Desde ella tenemos amplias panorámicas sobre Estella. Es el colofón perfecto a la visita a la Basílica de la Virgen del Puy.
En este lugar llovieron estrellas, fusilaron a generales y miles y miles de devotos desde hace casi mil años han acudido con fervor a ver a su patrona. Un lugar con historias y con Historia que no hay que perderse.
Más información:
- LA VIRGEN DEL PUY
© Julio Asunción. e-mail: julioasuncion@hotmail.com
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