Tras haber disfrutado con la contemplación de las esculturas de la portada ahora nos fijaremos en la escultura gótica del claustro.
Según entramos en el claustro del Monasterio de la Oliva veremos un interesante capitel con seres medio humanos medio animales. Allí veremos una sirena, un centauro y lo más sorprendente es un ser simiesco que hunde su mano en la piedra de la pared fuera y con el ano bien marcado colocado en dirección al espectador. Está visto que los monos del Monasterio de la Oliva no destacan por su educación (recordemos el mono auto-felación de la portada).
Sirena, centauro y mono del Monasterio de la Oliva |
En un capitel cercano vemos a Sansón venciendo a un león gracias a su prodigiosa fuerza otorgada por gracia divina. En otros capiteles está representado San Miguel pesando las almas y a otro ángel que mira hacia el espectador con los brazos alzados y con hábito que parece de monje.
Ángel monje del Monasterio de la Oliva |
Otra representación me pareció muy curiosa. Hasta el momento no he encontrado la interpretación de la escena. Es un hombre cómodamente recostado sobre lo que parece ser un jabalí que está destripado al que se le salen los intestinos por la herida.
Jabalí destripado y hombre durmiendo del claustro del Monasterio de la Oliva |
Cerca de la entrada a la iglesia podemos ver representaciones de los evangelistas acompañados de sus animales simbólicos.
Racimos de vid |
En varios capiteles podemos ver racimos de uvas y hojas de vid. Además de su simbolismo relacionado con la Eucaristía estos racimos de uva también nos recuerdan la tradición vitivinícola de la zona. De hecho todavía a día de hoy el Monasterio de la Oliva elabora unos excelentes vinos que se pueden adquirir en la tienda y que se elaboran en la bodega cercana al monasterio con las uvas de la zona.
Por último dentro de la iglesia, aunque la sencilllez y la monumentalidad de la arquitectura cisterciense predomina también podemos ver un curioso capitel esculpido con dos curiosos seres, uno de ellos con cara humana cuerpo de ave. ¿Cuál es la causa que entre tanta columna desnuda aquí se hayan representado estos seres sin duda relacionados con el infierno? Sólo el escultor o el que le encargó el trabajo lo sabe. Quizá no querían que nos olvidáramos de los castigos que sufrirían los que no accedieran al gran templo cisterciense con el debido respeto.
Por último dentro de la iglesia, aunque la sencilllez y la monumentalidad de la arquitectura cisterciense predomina también podemos ver un curioso capitel esculpido con dos curiosos seres, uno de ellos con cara humana cuerpo de ave. ¿Cuál es la causa que entre tanta columna desnuda aquí se hayan representado estos seres sin duda relacionados con el infierno? Sólo el escultor o el que le encargó el trabajo lo sabe. Quizá no querían que nos olvidáramos de los castigos que sufrirían los que no accedieran al gran templo cisterciense con el debido respeto.
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