La población de Sax se siente orgullosa de su castillo. No es para menos. El Castillo de Sax es una imponente fortaleza que se alza sobre una gran peña que domina todo el valle del Vinalopó, provincia de Alicante. Parece como si las piedras que forman el castillo desafiaran la ley de la gravedad. Y es que los fuertes muros se agarran en difícil equilibrio sobre las inclinadas laderas.
El castillo de Sax es un castillo con la épica de esos monumentos que nos trasladan a lass historias legendarias de la Edad Media. La peña sobre la que se levanta el castillo nos puede hacer imaginar el lomo de un gran dragón que hubiera quedado convertido en piedra por el hechizo de un poderoso mago.
Desde luego el Castillo de Sax no pasa desapercibido para los conductores que cada día pasan por la autovía cercana que une Alicante con Madrid. Carretera moderna, que atraviesa el valle del Vinalopó que era vía de comunicación histórica y prehistórica que comunicaba el mar con la meseta castellana. Este corredor de comunicación era controlado perfectamente desde el castillo de Sax, que ejercía un control visual y territorial sobre lo que también fue una zona de frontera. Frontera primero contra los musulmanes durante la Reconquista y frontera más tarde entre los reinos de Castilla y Aragón en la Edad Media.
El castillo fue construido por los musulmanes en el siglo X, si bien en las laderas de la peña se han encontrado restos romanos e íberos lo que hace pensar en una ocupación anterior.
Todavía de la primitiva construcción musulmana del siglo X quedan algunos muros del castillo como el que se puede ver a la izquierda del la puerta principal de entrada.
El castillo fue construido por los musulmanes en el siglo X, si bien en las laderas de la peña se han encontrado restos romanos e íberos lo que hace pensar en una ocupación anterior.
Todavía de la primitiva construcción musulmana del siglo X quedan algunos muros del castillo como el que se puede ver a la izquierda del la puerta principal de entrada.
En 1239 caballeros de la Orden de Calatrava al servicio del rey Jaime I el Conquistador desalojaron del casi inexpugnable castillo a los musulmanes. La mayor parte de lo que hoy vemos del castillo de Sax son reformas posteriores a la toma del mismo por las tropas cristianas.
Para visitar el castillo, el ayuntamiento de Sax ha habilitado una escalera que desde la ermita de San Blas nos permite ascender desde el pueblo a la fortaleza. La escalera también es un atractivo turística, ya que trepa por la ladera de forma muy aérea al tiempo que disfrutamos de unas excelentes panorámicas del pueblo.
Para visitar el interior del castillo de Sax lo mejor es ponerse en contacto con el Ayuntamiento de Sax que hace visitas guiadas determinados días de la semana.
Para visitar el interior del castillo de Sax lo mejor es ponerse en contacto con el Ayuntamiento de Sax que hace visitas guiadas determinados días de la semana.
La ladera norte del castillo es una zona natural, una pinada, donde encontraremos también otro de los monumentos del pueblo: un pozo de nieve, construcción habilitada para preservar el hielo para su posterior uso. Es muy recomendable acceder desde esta ladera norte al vértice geodésico y a la cruz que corona la parte más oriental de la peña dónde está el castillo. Este es uno de los lugares desde donde se tienen las mejores vistas tanto del pueblo como de su castillo.
El Castillo de Sax lleva a nuestra imaginación a esos tiempos medievales de luchas continuas y de vida de frontera. Si tenemos la suerte de visitar Sax durante sus fiestas de Moros y Cristianos el viaje al tiempo del medievo será completo. En la fiestas el pueblo se vuelca y cientos de vecinos visten al modo medieval y se lucen en coloridos desfiles como el que puedes ver en este vídeo.
El Castillo de Sax lleva a nuestra imaginación a esos tiempos medievales de luchas continuas y de vida de frontera. Si tenemos la suerte de visitar Sax durante sus fiestas de Moros y Cristianos el viaje al tiempo del medievo será completo. En la fiestas el pueblo se vuelca y cientos de vecinos visten al modo medieval y se lucen en coloridos desfiles como el que puedes ver en este vídeo.
Hola Julio, pues no, no se parece al de Zafra la toma me ha llevado a engaño y el lugar que escogiste para ella. Este es de unas dimensiones muchos mayores ya que el de Guadalajara está prácticamente en una roca. Perdón pero no había visto tu otra entrada más específica sobre el castillo.
ResponderEliminarSaludos.