El río Salazar, crea aquí su mayor obra. Ha horadado las estribaciones de la sierra de Leire hasta formar paredones que superan los 100 metros de caída. Son 6 kilómetros de roca y vida. De vida porque la Foz es un reducto natural casi inaccesibl al hombre por su orografía abrupta, lo que ha hecho que se haya convertido en un paraíso natural para gran número de especies naturales. De ahí que esta foz esté protegida con la figura de Reserva Natural desde 1.987 y además forme parte de la zona de Especial Protección para las Aves de la Sierra de Leyre-Foz de Arbayún.
Pero si tenemos paciencia, tiempo, unos buenos prismáticos y un poco de suerte, además de buitres podremos ver a la majestuosa águila real, al rápido halcón peregrino, a fugaces aviones y vencejos, al raro alimoche y al aun más raro quebantahuesos…
Podemos completar la visita a la Foz de Arbayún con algunas rutas cercanas. Para más información consultar:
Megalitos de Ugarra
Dolmen de Puyomediano
Castro de Napal
Si te gusta el senderismo, el arte o la arqueología, prueba a visitar mis otros blogs:
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