Hace algo más de 2.200 años en las cercanías de la ciudad de Lliría se produjo la destrucción dramática de un pequeño poblado ibérico. Allí vivía un señor de la élite ibérica junto a su familia y sus sirvientes y algún que otro esclavo. No sabemos como se llamaba este poblado por sus habitantes. Hoy lo conocemos como el Castellet de Bernabé.
El yacimiento arqueológico es de los más interesantes y mejor estudiados de la Comunidad Valenciana. Ocupa la cima de un cerro de poca altura. Una de las características principales de este yacimiento arqueológico es que está totalmente excavado. La mayoría de los poblados iberos, debido a su tamaño y a la falta de presupuesto para campañas arqueológicas, sólo están parcialmente excavados.
En los 1000 metros cuadrados del Castellet de Bernabé los arqueólogos han podido sacar interesantes conclusiones. Por ejemplo la ocupación y el dominio del territorio en la Edetania, la región ibérica donde se halla el poblado. A partir de una gran ciudad ibérica que era la capital de la Edetania como era Edeta, hoy en la actual Lliría, pequeños poblados y caseríos gobernados por elementos de las élites explotaban la riqueza agrícola del entorno cercano. Así se establecía una red de dominio sobre todo el territorio.
En el poblado se han conservado los cimientos de todas las estancias. Por los hallazgos en varias de ellas se ha podido saber que varias habitaciones estaban dedicadas a trabajos agrícolas, como la molienda del grano o la elaboración de vino y aceite. Una de las habitaciones se piensa que era una fragua donde se realizaban aperos agrícolas, herraduras y armas.
Las habitaciones se distribuían a los lados de una calle central. La parte trasera de las casas formaban la muralla que protegía el poblado. El poblado incrementaba su defensa al aprovechar las laderas del cerro como defensa natural.
En el Castellet de Bernabé se conserva la entrada del poblado, la calle central, las escaleras de varias casas que llevaban a pisos superiores y un aljibe. Pero lo más interesante es un grupo de cinco habitaciones en el extremo nororiental del yacimiento. Se han identificado como la vivienda del señor ibero que mandaba en el asentamiento. Un estrecho pasillo comunica estas estancias entre sí y las independiza del resto del poblado. Esta “casa del jefe” perfectamente diferenciada no es nada habitual en los poblados ibéricos.
Entre los materiales encontrados en el yacimiento destaca un plomo escrito y una gran abundancia de cerámicas incluyendo algunas piezas áticas de gran calidad. Un hallazgo muy interesante fueron los 20 enterramientos infantiles distribuidos bajo el suelo de varias dependencias. Eran niños de corta edad (menos de 6 meses) que todavía no eran considerados plenamente integrados en la comunidad y no recibían el enterramiento habitual entre los iberos (incineración). Este tratamiento funerario con los infantes perpetúa prácticas ya documentadas en la Edad del Bronce.
El Castellet de Bernabé fue ocupado entre los siglos V y III a.C. ¿Cuál fue su fin? Podríamos pensar que su destrucción ocurrió en el contexto de la segunda guerra púnica (218-201 a.C.). Esta guerra entre cartagineses y romanos empezó con la toma de la cercana Sagunto por los primeros. No sería extraño que el conflicto y la extensión del dominio de la zona por los cartagineses hubiera acabado también con el Castellet de Bernabé. También la destrucción pudo ser obra de las legiones romanas en su avance posterior.
Podemos imaginar al señor ibero vistiendo su casco y asiendo con fuerza su falcata y su lanza para defenderse contra los atacantes. No sería la primera vez que luchaba siendo la élite ibérica una casta de guerreros. Pero sí fue la última. Tanto él como todos los habitantes del poblado defendieron con valentía la que había sido casa de sus antepasados durante dos siglos. En la entrada principal del poblado vemos parte de un muro que cierra la entrada. El muro se construyó tras un primer ataque que fue rechazado para así reforzar la defensa del poblado. Pero todo fue en vano. Cerca de la puerta de entrada y en varios puntos de la muralla, podemos ver todavía la piedra ennegrecida por el fuego que acabó consumiendo el Castellet de Bernabé. Se encontraron tinajas rotas en la calle central del poblado, resultado del expolio de los atacantes. En el Castellet de Bernabé se produjo un episodio más de unos tiempos duros donde una hermosa y misteriosa cultura, la ibérica, iba a desaparecer poco a poco con la llegada de los romanos.
Para visitar el Castellet de Bernabé hay que ponerse en contacto con la Oficina de Información turística de Lliría (Telf: 96 279 15 22), donde nos dejarán la llave para entrar en el yacimiento arqueológico. Desde aquí quiero aprovechar para agradecer el trato amable y profesional que tuvieron conmigo.
El yacimiento se encuentra en el kilómetro 15 de la carretera que lleva a Alcublas desde Llíria (CV-3380). El coche se deja en el comienzo de una pista forestal que habrá que andar 10 minutos para llegar al yacimiento. Las coordenadas del aparcamiento para el gps son: 30S 698665 4402132
Quien quiera profundizar más en este interesante yacimiento puede consultar el excelente trabajo dirigido por Pierre Guerin: El poblado del Castellet de Bernabé y el Horizonte Ibérico Pleno Edetano
Y si te interesa tener una visión novelada del mundo Edetano te recomiendo la novela "Edecón, príncipe de Edeta" de Alfredo Mondriá Pérez, donde el autor imagina el Castellet de Bernabé como el lugar de nacimiento del líder edetano más importante cuyo nombre ha llegado hasta nosotros.
Que pueblo iberico lo construyo?
ResponderEliminarLos edetanos. Un saludo
EliminarQuien lo construyo
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