El Cerro de
los Santos se encuentra entre Montealegre del Castillo y Yecla, casi
en el límite entre las provincias de Albacete y Murcia. Es un cerro
de escasa altura. Se eleva
tan solo 30 metros sobre el terreno llano circundante. Para acceder
al yacimiento arqueológico tendremos que desviarnos por una pista de
tierra que sale a la derecha en la carretera que va de Montealegre a
Yecla (CM-3209) a la altura del kilómetro 54,400. Solo tendremos que
recorrer un centenar de metros esta pista para llegar a la misma base del Cerro de los Santos. Desde la misma carretera se ve el obelisco que recuerda la importancia de este yacimiento arqueológico.
- Mapa, localización y soporte gps ruta Cerro de los Santos
- Mapa, localización y soporte gps ruta Cerro de los Santos
Lugar donde se encontraba el templo íbero |
El obelisco
no se encuentra en la cima del cerro. Se encuentra en el lugar donde
se excavó el antiguo templo íbero que tuvo
que ser
el lugar lugar sagrado principal de la población que vivía
en las poblaciones de alrededor. Junto al monolito se pueden apreciar restos de las catas
arqueológicas que se han realizado recientemente. Ya no queda
ninguna de las estructuras que salieron a la luz con las primeras
excavaciones. Excavaciones que se realizaron hace mucho tiempo. De
las primeras de
las que
se tiene constancia en España.
Visité el Cerro de los Santos
al atardecer, lo cual recomiendo. La luz del sol poniente se
deslizaba hacia la punta del Obelisco marcando que pronto iba a
llegar la noche. En la soledad del lugar me encontré con lo sagrado.
Imaginaba sacerdotes y sacerdotisas haciendo sus ritos al ponerse el
sol en lo más alto del cerro mientras los feligreses les miraban
respetuosos mientras entonaban sus oraciones desde los alrededores del templo.
Templo que estaba adornado con todas las figuras de exvotos que
recordaban la sacralidad del lugar. Esculturas que también se
levantaban en los alrededores del templo y en la ladera que ascendían
hacia lo más alto del cerro.
Estatuas del Cerro de los Santos en el Museo de Albacete |
Subí a lo más alto del cerro
para acabar de ver cómo se ponía el sol. Entonces, algo me llamó
la atención. Hacia el sur otra montaña sagrada, el monte Arabí,
con varios abrigos de arte rupestre y con grabados que se hicieron
hace miles de años. Dirijo ahora la brújula hacia el norte, en
dirección contraria al Monte Arabí. En esa dirección destaca el
cerro Media Barba. De tal manera que prácticamente entre el monte
Arabi, el Cerro de los Santos y el Cerro Media Barba se formaba una
recta Norte-sur. Además el perfil del Monte Arabí y el Cerro Media
Barba desde la cima del Cerro de los Santos es muy parecido, lo que
no tuvo que pasar desapercibido para los que eligieron el Cerro de
los Santos como lugar Sagrado.
El Monte Arabí desde la cima del Cerro de los Santos |
El Cerro Media Barba desde el Cerro de los Santos |
También me di cuenta que la cima del cerro, que cae en precipicio hacia el sur, forma un balcón desde donde se puede seguir la puesta de sol a lo largo de todo el año. El cordal del Cerro de los Santos sigue una dirección Este-Oeste, perpendicular a la línea imaginaria que marcan el Cerro Media Barba, el Cerro de los Santos y el Monte Arabí, ¿Otra extraña casualidad? ¿Pensar que tienen que ver con la elección del santuario son acaso estas hipótesis fantasiosas? Quizás, pero te aconsejo que acudas al lugar al atardecer y que subas a lo alto del Cerro de los Santos a ver la puesta de sol. No sería de extrañar que sintieras que realmente estás en un lugar especial, como sentí yo aquella tarde de invierno.
Poco a poco la luz fue cayendo. Volví hacia el coche. Me daba la impresión que también volvía el presente después de haber hecho un rápido viaje al mundo más sagrado de los íberos. Miro por última vez atrás y veo el obelisco a la falda del modesto cerro que, por alguna razón fue considerado sagrado en la antigüedad. Es cierto que no he visto estructuras arquitectónicas. Tampoco es un lugar espectacular desde el punto natural. Pero el Cerro de los santos es historia viva, historia de los íberos, historia de la arqueología.
Y tambíen es parte de la historia del arte contemporáneo. Picasso, que se vio envuelto en un turbio asunto del robo de una de las esculturas del Cerro de los Santos del Museo del Louvre, fue influido en su obra por la estética de las esculturas de este yacimiento arqueológico.
Poco a poco la luz fue cayendo. Volví hacia el coche. Me daba la impresión que también volvía el presente después de haber hecho un rápido viaje al mundo más sagrado de los íberos. Miro por última vez atrás y veo el obelisco a la falda del modesto cerro que, por alguna razón fue considerado sagrado en la antigüedad. Es cierto que no he visto estructuras arquitectónicas. Tampoco es un lugar espectacular desde el punto natural. Pero el Cerro de los santos es historia viva, historia de los íberos, historia de la arqueología.
Y tambíen es parte de la historia del arte contemporáneo. Picasso, que se vio envuelto en un turbio asunto del robo de una de las esculturas del Cerro de los Santos del Museo del Louvre, fue influido en su obra por la estética de las esculturas de este yacimiento arqueológico.
Dama sedente del Cerro de los Santos |
Días después, visité el
Museo de Albacete con su espectacular sección dedicada al mundo
íbero. Y allí estaban esas esculturas que se encontraron allí. Son
sólo una pequeña parte, lo que nos hace una idea de la enorme
riqueza del yacimiento arqueológico del Cerro de los santos.
Representaciones de guerreros, de diosas, de sacerdotisas quizás.
Quizás alguna de esas esculturas guarde en su interior el espíritu
de alguna de esas mujeres que oficiaron sus ritos sagrados en el
santuario del Cerro de los santos. Seguro que esas sacerdotisas
pidieron a los dioses por la perduración de su pueblo. Y los dioses
del santuario concedieron el deseo. El mundo de los íberos sigue
vivo y empezó a vivir para nosotros, los hombres y mujeres del siglo
XXI en Montealegre del castillo, en el Cerro de los Santos.
© Julio Asunción
No hay comentarios:
Publicar un comentario